Calzado para ciclismo de carretera, cómo elegir el más adecuado

Las personas que hacen sus primeros pinitos encima de una bicicleta no le dan demasiada importancia al calzado. Y es lógico. Al principio, cuando se hacen pocos kilómetros, quizás no sea necesario llevar un calzado especial. Sin embargo, a medida que vayamos incrementando las distancias y la dedicación a este bello deporte, nos daremos cuenta de que necesitamos estar más preparados. Querremos entonces comprarnos todos los accesorios posibles. Algunos serán inútiles (por pura estética), otros necesarios. Entre los segundos, sin duda, está el calzado para ciclismo de carretera.
Siempre que nos aficionamos a un deporte, vamos poco a poco adquiriendo productos específicos. Si es al running, seguro que empezamos corriendo en chándal y con cualquier camiseta que tengamos por casa. Pero con el tiempo tendremos mallas, camisetas térmicas y, por supuesto, unas buenas zapatillas. Si nos gusta el senderismo terminaremos por comprarnos botas de montaña, pantalones especiales y bastones.
De todo lo anterior, lo más difícil de comprar, y para lo que más consejos necesitaremos pedir, es para las zapatillas de correr y las botas de montaña. Si lo que nos gusta es la bicicleta, también deberemos escuchar la voz de algún experto antes de adquirir el calzado para ciclismo de carretera.
¿Cuál es el calzado para ciclismo de carretera que más nos conviene?
Antes de entrar en una tienda especializada debemos tener claras una serie de cuestiones. El vendedor (si realmente sabe) nos las va a preguntar para recomendarnos un calzado para ciclismo de carretera u otro.
En primer lugar el uso que se le va a dar. Si lo que queremos es una zapatilla cómoda, pero de no gran rendimiento, apostaremos por una de suela gruesa. Si, por el contrario, estamos pensando en comenzar a competir (de manera amateur, obviamente) mejor elegir un calzado con suela de fibra de carbono. Rígida, a la par que ligera. Estas zapatillas están diseñadas para montar con pedales automáticos, la cualidad de la rigidez es necesaria para que enviemos toda nuestra fuerza al pedal a través de la suela.
Una vez decidido el tipo de calzado para ciclismo de carretera, comenzaremos a probarnos. Es vital que la zapatilla se adapte al pie, pero sin ir demasiado ajustada. Que tenga algo de holgura.
En cuanto al precio, como en todo, es realmente variable. A partir de 60 euros, más o menos, podemos adquirir calzado para ciclismo de carretera de calidad decente.