Flora y fauna en el Pirineo aragonés

Hemos hablado muchas veces del Pirineo aragonés en este blog y, ya lo avisamos, vamos a seguir haciéndolo. Porque los Pirineos, en general, y la parte aragonesa, que es la que más cerca nos queda, en particular, son un mundo dentro del mundo. Miles de lugares espectaculares. De montañas, ríos, árboles, senderos, plantas, animales. Y lo que toca repasar hoy es la flora y la fauna en el Pirineo aragonés.
Animales y plantas en el Pirineo aragonés
Focalizaremos este repaso a la flora y la fauna del Pirineo aragonés en uno de los lugares más impresionantes y con más variedad: el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.
Fauna
Se han localizado en Ordesa 13 clases de reptiles, 80 aves, 50 mamíferos, 4 tipos de peces y 7 especies de anfibios. Santo y seña de los Pirineos es el quebrantahuesos. Pero también otras aves como el águila real, la chova piquigualda o el buitre leonado. En las aguas abundan truchas, tritones y ranas pirenaicas.
Entre los mamíferos, el sarrio y el bucardo (especie de cabra montesa) también se pueden ver. Hemos repasado algunas de las especias más extrañas y, en algunos casos, casi sólo presentes en los Pirineos, pero, por supuesto, las especies más normales también viven en estas montañas.
Flora
La flora pirenaica del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido alcanza las 1.500 especies. Una espectacular mezcolanza cromática y olfativa que cubre como una suerte de manta colorida las faldas de todos los picos pirenaicos. Allí conviven en perfecta armonía especies comunes con otras propias de este territorio. Entre las segundas: la madreselva, la oreja de oso o la corona del rey. Dentro de las que son algo más comunes, cada recoveco de las montañas pirenaicas está repleto de gencianas, lirios, merenderas o prímulas.
En cuanto a los bosques, también muy abundantes, en ellos hay tres variedades de árboles protagonistas: pino silvestre, abeto blanco y haya. Otro de los lugares en los que la vegetación crece en libertad es en las veras de los ríos. Fresnos, abedules y sauces viven cerca del agua.
Entre la flora de los Pirineos aragoneses también destacan las encinas o el pino negro. La primera de las especies se puede ver, sobre todo, en el precioso cañón de Añisclo. La flora y fauna en el Pirineo aragonés es tan bella como variada. Miles de colores que visten maravillosos paisajes a lo largo y ancho de estas estribaciones montañosas.