¿Qué hacer si te pierdes en la montaña?

La montaña, a veces, es traicionera. Un despiste puede hacer que nos desorientemos, nos perdamos y pasemos unos momentos de angustia hasta que encontramos el camino correcto para llegar a nuestro destino. Hoy vamos a ver algunos consejos que te ayudarán evitarlo y a ponerle solución si, irremediablemente, sucede. Ante todo, es muy importante mantener la calma y dejar la cabeza fría para pensar con tranquilidad y poder regresar a casa sanos y salvos.
- Nunca salgas solo y lleva tu móvil con la batería cargada. Sabemos que la tecnología a veces falla (o si la ruta ha sido larga quizá se haya gastado la batería). Así que es importante que estudies el camino previamente y lleves contigo mapas e información necesaria. Si te pierdes y no tienes el móvil para guiarte, usa los mapas para situar puntos de referencia que tengas alrededor y encontrar el camino correcto.
- Si desde ese punto de referencia ves algún camino, carretera, una casa… lo que sea, camina hacia ahí. Si no ves nada, debes andar hacia abajo hasta que topes con algún río; sigue su curso hasta que llegues al pueblo o a alguna zona con gente.
- Lleva una brújula y aprende a orientarte con ella. Pon el mapa en el suelo, sitúa los puntos de referencia y traza una ruta de salida.
- Si no tienes brújula, recuerda que el sol se pone por el oeste y sale por el este y si clavas un palo en el suelo al mediodía la sombra que proyecte te indicará el norte. Si se hace de noche, la Estrella Polar es la que marca el norte. Además, si cuando el sol se encuentra en el punto más alto (al mediodía también) te pones de espaldas, te encontrarás mirando hacia el norte.
- Dosifica la comida y la bebida que te queda por si acaso el tiempo de extravío se alarga más de lo debido. Debes ir bien preparado con agua y alimentos con alto nivel de calorías. No comas todo de golpe ni te bebas toda el agua, ya que puedes ir necesitando aprovisionamiento durante más rato del que imaginabas…
- Antes de salir a la montaña, dile a tu familia o amigos dónde estarás, qué ruta vas a hacer y la hora que tienes prevista para regresar. Si por el motivo que sea no se cumple la predicción estarán atentos y pueden salir en tu ayuda.
- Si estás perdido y el tiempo atmosférico comienza a estropearse, busca un lugar para refugiarte y vuelve a iniciar tu camino cuando haya pasado el temporal o cuando te sientas seguro para continuar. Debes protegerte del viento y de la lluvia y evitar que la temperatura del cuerpo descienda demasiado.
- Si decides no moverte de este lugar por falta de visibilidad o porque no estás seguro de encontrar algún problema durante el trayecto, tendrás que esperar a que llegue la ayuda. Es imprescindible que realices algún tipo de señalización de socorro para que puedan localizarte.
- Si te mueves, ve dejando señales de por dónde has pasado, como alguna marca en el suelo, piedras o árboles. Si en tu mochila llevas algún objeto que refleje, colócalo sobre la cabeza o los hombros por si la ayuda aérea está buscándote.
- Sobre todo debes estar lo más tranquilo posible y dosificar tus energías. Los nervios precisamente no te ayudarán a conseguirlo. Ya sabemos que esto no resultará muy fácil de lograr si la situación se está complicando por efecto del mal tiempo y no sabes si continuar, si parar, si construir un refugio para pasar la noche o arriesgarte a seguir por el camino que has cogido.