Consejos para afrontar un sendero de gran recorrido

Si nos gusta el senderismo y lo practicamos de manera habitual es inevitable que queramos superarnos. Es algo inherente a la condición humana. Nos gusta superar retos. Vencer obstáculos. Llegar a lugares que nunca habíamos soñado hoyar. Empezaremos por hacer rutas cortas, de 5 o 10 kilómetros. Las de 20 o 25 nos parecerán imposibles. Pero llegará un día en que también las completemos. Nos plantearemos entonces realizar una más larga y por el monte, pasando una noche en algún refugio perdido de la montaña. Y después… Lo más probable es que queramos probar un sendero de gran recorrido.
Seguro que durante alguna de estas excursiones nos hemos cruzado con senderistas que estaban haciendo una ruta de un mes. Cruzando el país o recorriendo, por ejemplo, todo el Pirineo. En ese momento les declaráremos nuestra máxima admiración y pensaremos que nosotros nunca lo haremos. Pero, nunca digas nunca jamás. Has entrenado, tienes experiencia y estás preparado.
Pautas básicas para realizar una ruta de gran recorrido
Estamos decididos. Sólo pensamos en seguir esas señales rojas y blancas con las dos letras más importantes para nosotros a partir de ese momento: G. R. (Gran Recorrido). Obviamente, el material dependerá mucho del tiempo que vayamos a estar andando. Por ello, en este artículo vamos a darte unos consejos muy básicos.
Equipaje: en algunos casos habrá que hacer un auténtico ejercicio de ingeniería. Debemos lograr que la mochila no pese mucho, pero que contenga todo lo esencial. Y con esencial no nos referimos a 10 jerseis, cinco pantalones y tres camisas por si un día duermes en un pueblo y quieres cenar de restaurante. Ropa, la justa. Y la gran mayoría que sea para abrigarnos en caso de que sea necesario.
Ropa de abrigo: si cuando realizamos una ruta corta es recomendable llevar ropa para cualquier tipo de climatología, en un sendero de gran recorrido huelga decirlo. Chubasquero, guantes, gorro, braga, camisetas térmicas…
Brújula: antes de acometer nuestra aventura tendremos que haber analizado en profundidad la ruta, no obstante, debemos llevar una brújula.
No ir solo: siempre se recomienda ir acompañado a la montaña. Pero existen muchas personas que prefieren hacer senderismo en solitario. De ser así, es estrictamente necesario que deje dicho a unas cuantas personas el lugar en el que va a estar y, a ser posible, que informe diariamente de su situación.
Esta lista debe completarse con agua, comida, linterna, navaja, botas, y muchas cosas más. Ya hemos dicho que sólo queríamos hacer mención a los aspectos más básicos y primordiales para hacer un sendero de gran recorrido. ¿Estás preparado?